«Vehículos Eléctricos para la Última Milla». Es un post elaborado por Alberto Escribano Peñalva , alumno del Grado en Transporte y Logística para publicar en el Blog del Grado en Transporte y Logística UCJC
¿Sabías qué? de carga vs autonomía
Debido a la pandemia las ventas y compras online se han disparado. Aumentando un 20% en España en 2020 y previéndose que crezca todavía más en los próximos años. Es por ello que la última milla se ha convertido en esencial en el proceso de venta. Además, tiene un impacto directo en la satisfacción del cliente.
La gestión de la última milla es extremadamente importante. Como podemos observar en grandes centros urbanos cuentan cada ve con mayores restricciones. Por ejemplo en Madrid Central, sólo se permite la circulación de vehículos Eco o Eléctricos 100%. Estas restricciones repercuten en la gestión de la última milla, también en sus costes.
Por ello, la importancia el vehículo que se use para la logística urbana no solo se ha de tener en cuenta la eficiencia y rapidez. Ahora también es importante reducir el impacto medioambiental en las zonas más pobladas. Como consecuencia las empresas logísticas han de electrificar sus flotas de última milla.
Ventajas vs Inconvenientes
Es cierto que el vehículo eléctrico nos ofrece muchas ventajas a la hora de hacer frente a la contaminación. Es más sostenible. Aunque se nos olvida tanto el proceso previo de la producción de las baterías. Y, cuando éstas alcanzan el final de su vida útil; tenemos proceder a su eliminación. Estos dos procesos son los dos mayores puntos negativos para este tipo de vehículos. Ya que durante su uso es cierto que su contaminación es muy baja.
Otro inconveniente importante es el coste de adquisición de un vehículo eléctrico frente a un vehículo de combustión. Siendo el del vehículo eléctrico mucho más alto. Por lo que hay empresas que tienen muy complicado la electrificación de su flota al 100%.
Capacidad de carga vs autonomía
Uno de los apartados de la logística urbana es poder tener la mayor capacidad de entrega en el menor tiempo posible. La mayoría de las furgonetas ubican las baterías en el chasis, por lo que no afectan al volumen aprovechable para carga (4.6 a 6.6 m3). Las empresas de última milla han de tener una excelente coordinación y gestión de los trayectos de su flota para una correcta optimización. Y, así poder repartir en los diferentes puntos de entrega con los movimientos estrictamente necesarios. Lo que las hace más sostenibles, menos contaminantes.
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