«Innovando en la Última Milla». Es un post elaborado por Alba Cámaras Pérez, estudiante del Grado en Transporte y Logística UCJC.
El término «última milla» ha ido cogiendo fuerza en las últimas décadas. Debido principalmente al ecommerce. Sobre todo post confinamiento y la fortaleza de empresas como Amazon. Pero, esto no quiere decir que el problema sea nuevo. Si a los problemas que ya existían con la última milla para el sector HORECA le sumamos los que está produciendo el ecommerce. Se crea un caos que necesita soluciones urgentes. Este caos, no solo se refiere a la contaminación atmosférica que se genera. También a la congestión y a los ruidos que se generan durante el reparto al consumidor final.
Si bien es cierto que se han puesto sobre la mesa soluciones como «Madrid 360». Que impide la entrada a ciertos vehículos a determinadas zonas de la ciudad (Madrid Central y Plaza Elíptica). O, soluciones similares en otras ciudades.
Sin embargo, ya sabemos que no es suficiente. Ni desde el punto de vista medio ambiental, ni social ni económico. Aunque bien es cierto que en esas zonas mejorarán los problemas, hay que buscar soluciones más eficaces y permanentes.
Los llamados microhubs son unos pequeños almacenes que se encontrarían en zonas estratégicas dentro de las ciudades. Permitiendo así que las furgonetas y otros transportes de reparto tengan que recorrer menos kilómetros para realizar esta última entrega. O, dicho de otra modo, que la última milla sea realmente última milla.
Existen dos proyectos que han planteado esta nueva forma de transporte, Microhubs 4.0 y Logiprime, aunque sus perspectivas son similares en algunos casos, también tienen algunas diferencias, aún que lo importante es que tienen el mismo fin.
