Estanterías Inteligentes, escrito por Pablo Bernal Villa (estudiante del Grado en Transporte y Logística UCJC).
Como colaborador de este blog, me gustaría proponer una idea propia como a muchos vosotros os pasa con asiduidad. Y juntándolas todas seguro que haremos crecer nuestro sector, la logística. Ayudando así, a que se convierta en la piedra fundamental de cualquier actividad empresarial
Tras haber tenido la oportunidad de trabajar en varios almacenes de empresas multinacionales. He comprobado que existe un gran margen de mejora en lo que a estanterías se refiere.
El método de ubicar todas las referencias es óptimo. Eso queda demostrado con sistemas como el XYZ o ABC. Ese campo está en continuo proceso y por el momento sigue avanzando.
Por tanto, en donde quiero incidir es en como está afectando el factor humano en procesos como el picking e inventarios entre otros. Al hacerse de forma manual, se expone la empresa a múltiples errores que suponen pérdidas. Esto ocurre cuando se mueven grandes cantidades de referencias sin apenas más control que el humano. Es cierto, que sistemas como RFID (Radio Frequency IDentification) están consiguiendo considerables mejoras en este aspecto. Pero, podríamos ir más allá.
Hacer de nuestras estanterías nuestro gran aliado dentro del almacén. Esa es la meta que debemos fijar para conseguir resultados mejores de los ahora tenemos.
Ahora bien, ¿cómo podemos conseguirlo?
Las estanterías de los almacenes medios apenas tienen una ubicación con un código de barras. Son los operarios quienes asignan esa localización a cada artículo al situar, cambiar y liberar esa posición. La estantería actúa como un mero receptor y no aporta más información que la que nosotros le asignamos.
¿Qué pasaría si nos diese información valiosa por sí misma?
He aquí la cuestión, a la que hago referencia en el título. ¿Por qué no invertimos en estanterías que sean capaces de darnos información en el momento que nos sea útil para la toma de decisiones? sin necesitad de hacer inventarios regularmente. Pues son ellas las que aportan los datos necesarios para la toma de decisiones. Decisiones como, el pedido a realizar al proveedor o saber si vamos a ser capaces de abastecer a nuestro cliente a corto plazo.
¿Cómo van a ser capaces de darnos información en tiempo real?
Desde tiempos lejanos, hemos sido capaces de asignar un peso a cada unidad/es medibles. Entonces, ¿ por qué no convertir a cada ubicación de las estanterías en simples balanzas que sepan cuanto peso están soportando? y por tanto la cantidad de cada artículo que se dispone.
¿Pero resulta caro?
Desde mi punto de vista, es una inversión con un retorno alto a medio y largo plazo. Nos va a reducir costes que antes suponían una importante parte de los costes dentro de la operación del almacén. A su vez, implementar este sistema a la par de sencillo, no va a suponer un coste inasumible.
¿Qué ventajas aporta?
La principal es saber el estado del inventario en tiempo real, pero no nos olvidemos de la monitorización de las entradas y salidas de los artículos en las estanterías, gestión automatizadas de pedidos de reposición, control de alertas por incidencias, reduciendo los tiempos de su resolución, y no menos importante la gestión de productos manipulados a granel como líquidos, polvos, granulados…. En los que no es posible un control visual.
¿Tendrá capacidad a mejora?
Este sistema de control de estanterías con peso, no sólo nos puede evitar el realizar inventarios o saber si estamos realizando el picking de las unidades exactas pedidas. Si no que en un futuro se podrá integrar con sistemas automatizados de reposición y picking y enlazar directamente con los sistemas de gestión de nuestros proveedores y clientes.
Es una simple idea, seguro que está ya en desarrollo o que empresas están por delante de lo que aquí se expone. Pero a su vez, quizás habrá otras que no han estudiado lo que aquí se expone. Por lo que espero que con este artículo abra la mente de grandes personas de este sector y que está idea nos sirva de ayuda en nuestro bien hacer.
Nota: este post se ha generado en el ámbito de la materia de Impacto Ambiental del Transporte en el Grado en Transporte y Logística (ver plan de estudios) de la Universidad Camilo José Cela (profesores: Marta Serrano Pérez y Tomás García Martín).
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