Drones aplicados a la agricultura, escrito por Virginia Bernal Martínez (estudiante del Grado en Transporte y Logística UCJC)
Antes de abordar los múltiples beneficios que tienen los drones aplicados la agricultura, es preciso tener en cuenta en qué consiste. Se trata de un vehículo no tripulado que es pilotado remotamente. Además, puede controlarse con un alcance de grandes distancias. Esto significa que la operación de estos drones se realiza en función de las instrucciones que el piloto le comunica de manera remota.
Una ventaja de los drones aplicados a la agricultura, es que pueden incluir una cámara que filma todo aquello que sobrevuela. Así pues, nos llegan imágenes sobre las hectáreas de campo y de los cultivos. Estos vehículos están equipados con novedosos sistemas GPS, infrarrojos, cámaras de alta resolución y controles de radares.
La maquinaria agrícola moderna y eficiente permite agricultores mejorar los cultivos. Los agricultores pueden reducir costes y mano de obra, a la vez que mejoran sus condiciones de trabajo y los beneficios. Por ejemplo, en Alemania, algunas granjas han empezado a implantar tecnologías avanzadas. De este modo, han obtenido mayores rendimientos por hectárea, además de un menor consumo de herbicida y combustible.
Basándose en esto, se espera que el uso de drones aplicados a zonas agrícolas crezca significativamente en los próximos años. En general, se ha demostrado que estos equipos ofrecen una amplia gama de aplicaciones que mejoran la agricultura de precisión. Por otra parte, los drones pueden reemplazar potencialmente la aplicación humana de productos fitosanitarios. Esto implica que puede minimizarse la exposición de los agricultores a productos tóxicos. Sin duda, se trata de una tecnología de altos vuelos.
Beneficios de los drones aplicados a la agricultura
Los drones aplicados a la agricultura (conocidos también como SARPs) presentan numerosos beneficios. A continuación se consideran algunos de los más relevantes.
(a) Supervisión del rendimiento
- Permiten un consumo eficiente de agua. Estos equipos pueden ir provistos de sensores inteligentes. Esto permite conocer las necesidades hídricas en cada planta. De este modo, el sistema puede estimar la cantidad óptima de agua a cada una de ellas. El resultado se traduce en un interesante ahorro tanto hídrico como energético.
- De forma análoga, permiten un consumo óptimo de fertilizantes. El sistema es capaz de detectar características edafológicas del suelo. Por lo tanto, la aplicación permite el uso de fertilizantes sólo en las zonas en la que es necesario.
- Detección temprana de enfermedades y plagas en cultivos. Se han desarrollado sensores que pueden detectar los cambios fisiológicos en las plantas y diagnosticar enfermedades agrícolas. Esta información es muy valiosa, ya que permite programar medidas de control preventivas para campañas futuras. De este modo, la siguiente cosecha puede puede programarse antes de que el cultivo esté en flor. La enfermedad puede localizarse y controlarse en ciertos puntos, evitando que afecte a la totalidad de la parcela.
(b) Supervisión de la calidad
- Indicadores de calidad en los cultivos. Gracias a los equipos de adquisición de imágenes pueden definirse indicadores. Existen modelos que correlaciones las imágenes térmicas o de infrarrojos con la humedad, cantidad de glucosa, grado de maduración, y otros parámetros. A partir del análisis de estos datos pueden definirse indicadores de calidad o de producción de los cultivos.
- Trazabilidad de la plantación. Los drones aplicados a la agricultura permiten realizar un conteo periódico de la plantación. Esto permite conocer cuáles son los plantones de crecimiento más tardío. De este modo, es posible evitar las deficiencias de crecimiento de cada planta y de las que están a su alrededor.
- Peritación de cultivos ante un siniestro. El sistema permite identificar con exactitud aquellas zonas que han sido afectadas por algún siniestro. Además, gracias a la adquisición de datos, pueden cuantificarse los daños ocasionados en las diferentes plantas en mayor o menor medida.
En definitiva, todos estos aspectos contribuyen a proporcionar un ahorro de costes significativo para las plantaciones. El sector de la agricultura puede beneficiarse de la tecnología, ya que los drones pueden mejorar la rentabilidad de los cultivos. Por otra parte, los drones aplicados a la agricultura contribuyen a disminuir el impacto ambiental de las plantaciones, regulando la aplicación de agroquímicos por debajo de lo establecido en la ley de cultivos.
Nota: este post se ha generado en el ámbito de la materia de Impacto Ambiental del Transporte en el Grado en Transporte y Logística (ver plan de estudios) de la Universidad Camilo José Cela (profesores: Marta Serrano Pérez y Tomás García Martín).