Desde el departamento del Grado de Enfermería de la Universidad Camilo José Cela, hoy queremos dar protagonismo a todas aquellas enfermeras que aportaron a la sociedad inventos útiles para la salud de las personas.
Varios de estos inventos creados por enfermeras fueron: la mochila portabebés, la jeringa que se utiliza con una mano, la bolsa de ostomías… Vamos a contar con un poco más de detalle algunas de estas historias:
Letitia Mumford patentó la jeringa que se puede utilizar con una sola mano 1899. El objetivo de esta enfermera fue proveer una herramienta que le permitiera inyectar el contenido sin la ayuda de un asistente. Esta aportación fue de suma importancia en el campo de la sanidad asistencial.
Elise Sorensen, tenía una hermana se llamaba Thora, le acababan de realizar un proceso quirúrgico al que sobrevivió pero tuvo que continuar viviendo con una ostomía y tenía miedo de salir a la calle y de tener una posible fuga de su estoma. Tras escuchar el problema de su hermana, Elise concibió la idea de la primera bolsa de ostomía adhesiva del mundo (1954). Así nació la multinacional Coloplast.
Anne Moore, enfermera pediátrica en Colorado, comercializó el primer portabebé en el mundo occidental, inspirado en aquellas madres que vio en Oeste de África llevando a sus bebés con ellas (1980).
Estas historias y muchas más, se recogen en el libro “Enfermeras Invisibles” de las autoras Vanessa Ibánez y Olga Navarro.
En la profesión de enfermería también se puede emprender, es un camino mucho más desconocido, pero con historias tan apasionantes como estas, vemos que es viable.