DIETAS MILAGRO DE CARA AL VERANO.

Para muchas personas, especialmente perfiles jóvenes, en unas semanas comienza la cuenta atrás para lucir cuerpo durante los meses de verano. Comienza el buen tiempo y la presión por tener un cuerpo perfecto afecta cada año a más personas. Sin embargo, esta presión social se contrapone con unos ritmos de vida y unos cambios de hábitos que han favorecido la creación de un entorno obesogénico, es decir, un ambiente que promueve el desarrollo de la obesidad. Disponibilidad en todo momento de alimentos procesados ricos en azúcares (supermercados, máquinas expendedoras, tiendas de autoservicio) trabajos sedentarios y, en general, un estilo de vida con poca actividad física.

La solución hace que muchos jóvenes sientan una especial obligación de adelgazar y esta obsesión ha provocado una proliferación de dietas y remedios adelgazantes accesibles a cualquier persona y cuya utilización indiscriminada puede provocar a menudo serias complicaciones a la salud. De acuerdo al Grupo de Revisión, Estudio y Posicionamiento de la Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas (GREP-AED-N), las llamadas “dietas milagro” son aquellas que se caracterizan por tener resultados rápidos, milagrosos y absurdos; carecen de evidencia científica, prometen pérdidas de peso inmediatas y sin esfuerzo, y a menudo, utilizan la imagen de personajes famosos, como “influencers”.

Además, la gran mayoría de ellas funciona pues al restringir la ingesta energética inducen pérdida de peso. Sin embargo, el peso perdido corresponde sobre todo a agua y la reducción de grasa corporal se acompaña muchas veces de pérdidas de masa muscular. La gran mayoría de estas dietas inducen a una alimentación desequilibrada al excluir o reducir la ingesta de algunos alimentos o grupos de alimentos y pueden comprometer el aporten de alguno de los nutrientes esenciales. Hay que tener en cuenta que suelen estar prescritas/recomendadas por personas ajenas a la nutrición, pudiendo llevarse a cabo sin la supervisión de un profesional, exageran los efectos científicamente demostrados de un nutriente o alimento, contienen listas de alimentos buenos o malos, así́ como prohíben el consumo de un alimento o de un grupo de alimentos e incluyen testimonios para aumentar la credibilidad.

“Se unen 2 elementos altamente peligros, el primero es que consiguen unos efectos rápidos con resultados notables y recomendadas por personajes conocidos y con cuerpos socialmente aceptados como sanos y deseables” comenta el Dr. Juan Pablo Hervás, director del Grado en Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Camilo José Cela. Añade que “lo normal es que provoquen una pérdida de peso notable, pero la recuperación de este peso o efecto yoyo o rebote, suele ser incluso mayor del peso perdido”.

Hay que tener en cuenta que muchas veces estas dietas milagros pueden ir acompañadas de una importante campaña de marketing, financiadas por compañías relacionadas con algún producto nutricional. El profesor Jesús Guodemar nos explica los principales tipos de dietas milagro “hipocalóricas desequilibradas, disociativa que pueden ser excluyentes basadas en eliminar algún nutriente de la dieta como la Dukan, Pronokal o “keto” o bien según su textura como líquida o semilíquida”.  Pero el verdadero peligro según advierte la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD) es que seguir estas dietas milagro durante largo tiempo, podría aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes, varios tipos de cáncer, fallo renal, hepático y osteoporosis.

Eduardo Cimadevilla, profesor del Grado en Nutrición Humana y Dietética de la UCJC nos recuerda que “para muchas personas la palabra dieta se ha convertido en sinónimo de comer sano y equilibrada o hacer ejercicio regularmente y ese el principal de los problemas”. En una sociedad donde los ultra procesados, el consumo de calorías vacías o la falta de control de la alimentación se ha convertido en un hábito parece que sólo las dietas milagro nos puedes devolver a una rutina de alimentación aun siendo incorrecta.

Según datos de la SEEN y la SEEDO En España, la población tampoco es consciente de que la mejor dieta comienza con una asesoría nutricional, y la mitad de los españoles recurre a métodos peligrosos para adelgazar. Solo 2 de cada 10 españoles estaría dispuesto a acudir a un especialista antes de comenzar un régimen para adelgazar, mientras que más del 51% ha reconocido que alguna vez ha utilizado métodos que ponen en peligro la salud.

El mejor tratamiento nutricional será aquel asesorado por un dietista- nutricionista, que la persona pueda incorporar a su vida cotidiana y que le permita alcanzar y mantener un peso corporal saludable. El Grado en Nutrición Humana y Dietética de UCJC tiene como finalidad primordial la formación de expertos en el ámbito de la Nutrición Humana y de la Dietética, y habilita para el ejercicio de la profesión regulada de Dietista-Nutricionista. UCJC ofrece una oportunidad única a los alumnos de formarse en la mejor universidad para estudiar nutrición y dietética en Madrid.

Este Grado se ha diseñado para que el estudiante adquiera una formación integral necesaria para ejercer funciones a nivel asistencial, docente e investigadora dentro del ámbito de la alimentación humana, tanto a nivel individual como colectiva. Todo ello, bajo las premisas de prevención y promoción de la salud, y para que el paciente recupere la salud dietéticonutricional y funcional.

La Universidad Camilo José Cela y el Grupo HM Hospitales han decidido unir su amplio conocimiento y su dilatada experiencia en un innovador proyecto de formación universitaria en Ciencias de la Salud. Un proyecto universitario pionero en el que se incorpora el hospital como eje fundamental y vertebrador del aprendizaje de nuestros futuros profesionales sanitarios. De esta manera, se favorece una oportunidad única para estudiar nutrición y dietética en la ciudad de Madrid con los mejores profesionales.