Desde el Grado en Enfermería y el Grado en Fisioterapia de la Universidad Camilo José Cela, queremos unirnos a la acción de divulgación y prevención del cáncer de mama en su día mundial, celebrado cada 19 de octubre.
En España, el cáncer de mama es la primera causa de mortalidad por cáncer en las mujeres. Afortunadamente, un diagnóstico precoz aumenta las posibilidades de curación (si se detecta en su etapa inicial, son casi del 100%).
El cáncer de mama es un tumor maligno que aparece en la glándula mamaria, puede ser un carcinoma in situ, sin invasión ni infiltración del tejido, o un carcinoma invasivo o infiltrante (ductal o lobulillar).
Los síntomas más frecuentes del cáncer de mama son el aumento del tamaño de las mamas, irregularidades en el contorno menor movilidad de las mamas al levantar los brazos, alteraciones en la piel de la mama, cambios en el pezón, nódulos en la axila; u otros síntomas más generalizados como cansancio, dolor óseo localizado y dolor en la mama a la palpación.
La prevención es FUNDAMENTAL: seguir hábitos saludables, un buen descanso y la realización de ejercicio físico moderado para mantener unos niveles óptimos de salud. Desde la atención primaria se hacen múltiples acciones para el diagnóstico precoz.
Y como prueba diagnóstica, la más eficaz es la mamografía, capaz de detectar lesiones hasta 2 años antes de que sean palpables y cuando aún no han invadido en profundidad el tejido ni se han diseminado a los ganglios u otros órganos. Se recomienda realizarse una mamografía cada 2 años a mujeres entre los 45 y 69 años.
Desde el ámbito de la fisioterapia, el drenaje linfático manual resulta esencial para el tratamiento post cáncer de mama, principalmente una vez que se ha producido una linfadenectomía o mastectomía. Dicha extirpación ganglionar generará, en muchos casos, problemas futuros de acumulación de linfa y mal drenaje que puede desencadenar en un linfedema. Evitar la aparición de enfermedades crónicas como el linfedema resulta esencial y por ello su tratamiento mediante el drenaje, debe figurar entre los tratamientos esenciales en estos casos. Es recomendable en todos los casos, una vez que el especialista en oncología autoriza el tratamiento, que la paciente reciba sesiones de drenaje linfático. Y no se debe olvidar el ejercicio terapéutico para recuperar la máxima funcionalidad.
Desde el ámbito de la enfermería, los cuidados a nuestras pacientes se extienden desde el proceso pre-quirúrgico, pasando por el ingreso hospitalario, siguiendo por los tan importantes cuidados post-quirúrgicos y los cuidados en hospital de día si fuera necesaria la quimioterapia. En resumen, la atención a estas pacientes se centra en los cuidados, en informar, orientar y sobre todo acompañar en el proceso de la enfermedad dándoles apoyo y a sus familiares.