Un reciente informe de la consultora PwC España informaba de que la industria de los medios y el entretenimiento en España experimentará un crecimiento medio del 1,9% anual en los próximos cinco años, hasta 2017.
Aunque frente a otros países este crecimiento es menor, en el contexto económico español es significativo que los negocios relacionados con las tecnologías digitales y los medios de comunicación crecerán de una manera continuada, con la consiguiente demanda de profesionales necesaria para cubrir sus necesidades.
La publicidad online y en TV, la industria de los videojuegos, el mercado editorial, sobre todo en su ámbito online, y el marketing digital como clave en las empresas para dar a conocer sus productos y servicios destacan como los sectores que van a liderar este crecimiento, impulsados por el aumento en la penetración de Internet en todo el mundo, que en este periodo superará el 50% de la población.
Es evidente que este crecimiento llevará asociado una demanda de profesionales capaces de cubrir unos puestos que, muy probablemente, van a enfrentarse a los desafíos más interesantes de la sociedad en este siglo. Como ya anunciamos en otro artículo de este blog, muchos de los niños que hoy cuentan con menos de 10 años trabajarán en profesiones que hoy aún ni siquiera existen.
¿Cómo se enfrenta un joven a este presente y futuro escenario profesional? Realmente, la actitud adecuada no difiere mucho de la que ya tiene respecto a su vida diaria: adquirir el conocimiento necesario para enfrentarse a la realidad cambiante y conocer las herramientas adecuadas para la expresión y el desarrollo de su personalidad. La elección que lleva a cabo a diario en este sentido marcará el grado de integración, éxito y satisfacción que va a conseguir en su vida personal y profesional.
Por ese motivo, combinar la formación teórica con un enfoque práctico en carreras o másteres que estén especialmente diseñados para facilitar la inserción en un mundo profesional estrechamente ligado a lo digital y que cuenten con una amplia etapa de prácticas remuneradas en empresas o instituciones será la clave ineludible a la hora de elegir formación universitaria que capacite para introducirse sin barreras en el escenario profesional de la próxima década.
La UCJC no es ajena a esta demanda en los dos sentidos: por parte de las empresas, que necesitan profesionales con una formación exigente, certificada por los principales organismos internacionales y eficiente en prácticas para el desempeño que van a realizar; y por parte de los jóvenes que buscan más que nunca que la Universidad canalice su esfuerzo hacia un objetivo profesional, claro, útil y eficiente.
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