¿Es justo el Derecho?

El pasado 8 de junio y en actividad conjunta del Departamento de Promoción y el Departamento de Derecho se celebró una webinar que mediante un debate/coloquio se buscó reflexionar sobre la pregunta, ¿es justo el Derecho?.

El Caso Arandina y las dos sentencias tan diversas y para algunos incomprensibles en su contradicción fue el centro sobre la que pivotó nuestra charla, donde participaron profesores y alumnos en el marco de interesantes preguntas y reflexiones.

Bajo la sombra de Ulpiano, el gran Jurista romano que definió la justicia como la voluntad de tratar a cada cual como se merece y encumbró al Derecho como “el arte de lo bueno y lo equitativo”, razonamos, desde la perspectiva de hoy, sobre lo discurrido por el italiano Cesare Bonasena, marqués de Beccaría, quien en un lejano 1764 Beccaría sorprendió e incluso asombró a la sociedad de su época con su famoso tratado “De los delitos y las penas”, donde discurría y ponía en cuestión, ¡que actual!, el supuesto efecto disuasorio de la pena de muerte, porque no impedía que se cometieran nuevos crímenes, abogando por su abolición.

Cuantas preguntas nos ofrece el proceloso mundo del derecho y que difíciles respuestas. ¿El derecho debe ser justo o legal?, ¿es compatible lo justo, lo injusto y lo que dice la Ley?, ¿no siempre lo legal es justo, y no siempre lo justo es legal?. Discurrir sobre ello no es tarea sencilla y así se puso de manifiesto en dicha jornada. Entre todos partimos de la idea de que es lo “Legal”, entendiendo que es aquello que es refrendado y permitido por ley. Supone que un comportamiento legal va a estar permitido y no va a ser sancionado o viceversa. Es objetivo e indubitado. Está en la norma. Lo legal es definido por el legislativo y representa aquello que concede libertades y derechos, así como también obligaciones y límites. Subjetivo y personal es lo “legítimo” o lo “justo”, pues tiene innato un aspecto que no se limita a la mera legalidad. Requiere conceptos tan hetéreos en muchos casos como lo moral y lo ético.

Y así el llamado ”caso Arandina”, su relación con lo legal y lo legítimo, sus concomitancias con la mal llamada “alarma social” y el derecho a legislar “en caliente” suponen un claro ejemplo de la virtualidad e importancia capital del debate en el entorno jurídico. De una primera condena, en diciembre de 2019, a 38 años de prisión para cada condenado a una segunda sentencia donde se indica que no se trata de violación, sino abuso sexual y se absuelve a uno de los acusados de todos los delitos y se rebaja las penas de los otros al rebajarse el propio delito. Y de nuevo las consistentes y pertinentes preguntas. ¿Cuál de las dos sentencias son justas?, siendo legales ambas, ¿son igualmente justas?.

Tan interesante debate se nos quedó a todos muy corto. El tiempo de nuestra reflexión, de aquella reflexión a veces ingrata y contradictoria que desde dentro de nosotros hacemos y compartimos juntos en esta webinar, tendrá una segunda parte. Desde el Departamento de Derecho seguimos comprometidos con nuestros alumnos en hacerles pensar y que sepan. Frente a la limitación del aprender buscamos la pasión y la excelencia del saber. Y el pasado 8 de junio así quedó demostrado.

Gonzalo Duñaiturria 

Profesor de Derecho en la Universidad Camilo José Cela.