Graziella Trovato.
La Bienal de Arquitectura de Venecia constituye, desde su institución en 1980, uno de los principales referentes de la reflexión teórica alrededor del estado actual de la disciplina y de los posibles caminos que esta puede o debe seguir.
En los últimos años, además, en su afán de competir con el creciente número de acontecimientos internacionales, la Bienal ha dejado de ser simplemente una exposición para convertirse en un motor de investigación y debate que se dilata a lo largo del año, implicando a las Universidades mediante un proceso de selección. Se ofrece así a los alumnos de las Escuelas seleccionadas la posibilidad de trabajar en el marco extraordinario de la ciudad de Venecia, interactuando con la vida de la “Mostra” y de sus protagonistas.
En este marco, Anupama Kundoo, profesora de la Escuela de Arquitectura y Tecnología de la Universidad Camilo José Cela (UCJC) y arquitecta invitada por el comisario de la Bienal de este año, el chileno Alejandro Aravena (Premio Pritzker 2016), ha pensado en hacer algo más. Durante los 10 días previos a la inauguración al público de la exposición, Kundoo ha organizado el taller “Building Knowledge in Venice. Designing the afterlife of the Biennale installation”, que cuenta con Alba Balmaseda, Sonali Phadnis y Yashoda Joshi como tutores y con la colaboración de Giulio Grillo y Giovanni Leone. Este taller se ha propuesto salir del recinto glamuroso del Arsenale, donde la exposición principal tiene lugar, para extender su participación y la de los alumnos a una de las áreas más desfavorecida de la ciudad, como es el barrio de Marghera, que sufre el impacto negativo de eventos internacionales como este.
En línea con el tema “Informar desde el frente”, propuesto por Aravena, el taller se ha planteado como una reflexión sobre la necesidad de acercar la disciplina arquitectónica a la sociedad, construyendo desde el conocimiento -de los materiales, las técnicas y las exigencias locales- y compartiendo y divulgando este conocimiento a nivel social. Dos fases de un mismo proceso que representan también las dos fases del Taller.
Por la mañana, los alumnos han podido asistir y participar en el montaje de los dos prototipos “Full Fill Homes” (modelo de vivienda asequible) y “Easy WC” (ejemplo de módulo de aseo asequible) que Kundoo expone en la Bienal y que han sido construidos en colaboración con el grupo activista Rebiennale con materiales reciclados de la bienal anterior. Por la tarde se han trasladado a Marghera para debatir con los habitantes sobre el futuro de estos prototipos que podrán ser desplazados y reutilizados asignándoles nuevos usos. Kundoo utiliza el término “asequible” para explicar esta actitud que está desde siempre en la base de su oficio. La Exposición permanecerá abierta hasta el 27 de noviembre, y supone una ocasión para visitar también en el espacio de I Giardini, la elegante exposición “Unfinished” del Pabellón Español, comisariada por Iñaki Carnicero y Carlos Quintans y galardonada con León de Oro por la calidad de los 67 proyectos seleccionados.