En clave de felicidad: Neruda

En mi afán de perder el respeto a esas matemáticas frías, calculadoras e incomprensibles, os invito a una nueva reflexión, que no tiene otro fin, más que la superación de nuestros miedos cotidianos a través de la mirada hacia la tan añorada felicidad. "Enseñar y aprender Matemáticas puede y debe ser una experiencia feliz" (C. Alsina 1991).

Resulta curioso que no se mencione en los objetivos educativos la Felicidad. Nos pasamos la vida buscándola, en ocasiones, nos acercamos a ella e, incluso, nos atrevemos a definirla de mil maneras.

Pero cómo no vamos a huir de semejante materia:

·       Estoy feliz: he logrado acabar con el programa

·       No vales nada… pero pasas

·       No te lo mereces… pero te apruebo

·      Como me han aprobado le perdono lo que nos han hecho sufrirPropongo una fórmula de Felicidad matemática para entrar en materia:

 

Felicidad = P + 5E + 3ªA

P = “personal” (visión de la vida, flexibilidad, adaptabilidad),

E= “existencia” (salud, amistades, estabilidad) y

A= “alta” (autoestima, ambiciones, expectativas).

(C. Rothwell y P. Cohen. 1999)

 

 

 

Uno de mis poetas favoritos es Pablo Neruda (Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, 1904-1973). Premio Nobel de Literatura 1971.

 

¡Ya empezamos, de El Quijote a la poesía!

¡Claro como el 2013 ha sido declarado el año de las Matemáticas del Planeta Tierra!

Buceando entre sus maravillosos trabajos me encuentro con la genial “Oda a los números”.

 

 

 

 

En él,  aparecen estructuras matemáticas a la vez que, profundiza, en el paso del tiempo (“…el tiempo se hizo número…”):“Los números/ que se vayan a la cárcel.[…]procreando/ hasta darnos la suma/ de la totalidad de infinito”.

 

El paso del tiempo y los números son infinitos aunque nosotros solamente somos capaces de disfrutarlos finitamente.

 

¿Por qué no contamos los colores, los años, los besos o las olas con los alumnos de Educación Infantil y Primaria?.

 

Contamos
los colores, los años,
las vidas y los besos,
en el campo
los bueyes, en el mar
las olas. Los navíos
se hicieron cifras que se fecundaban.

 

 

¿Por qué no nos aproximamos a las decenas, centenas, unidades de millar, saliendo al campo y recogiendo espigas?.

 

Las ciudades
eran miles, millones,
el trigo centenares
de unidades que adentro
tenían otros números pequeños,
más pequeños que un grano.


¿Por qué no inventamos problemas partiendo de lo que tenemos delante de nuestros ojos?.

 

La cifra semanal de tu salario
se desarrolle hasta cubrir tu pecho.
Y del número 2 en que se enlazan
tu cuerpo y el de la mujer amada
salgan los ojos pares de tus hijos
a contar otra vez
las antiguas estrellas

 

 

¿Por qué no proponemos respuestas creativas, artísticas, literarias………..

·       Diseñar una carátula matemática que ilustre este poema.

·       Escribir un cuento corto en el cual se recree algún conocimiento matemático de la Oda.

·       Un pintor crea formas Neruda con palabras: ¿Buscamos formas y  figuras en la poesía?

·       Inventa tu propia poesía matemática.

·       Pásale este poema a tus contactos de Facebook y seguidores en twitter.

 

 

Todo ser humano que se enfrenta a la vida, que planta cara a las Matemáticas, es un ser sociable, tiene una lengua, costumbres y experiencias. Es alegre, está ansioso por hacer cosas y conocer nuevos horizontes. Tiene sentidos, a parte del tacto para escribir,  huele perfumes, se alimenta, mira cosas y oye música.

 

Todo ser humano que se enfrenta a la vida y planta cara a las Matemáticas busca ser FELIZ.

 

La felicidad de cada uno de nosotros vale más que todos los programas, que todas las palmaditas en la espalda. Llega hasta donde puedas. No intentes jugar con el tiempo. Supera el frío del sistema.  Si la felicidad llega a tu clase el sistema queda desconcertado. Aprovéchate de ello. (C Alsina)

Tenemos la necesidad casi obligada de enseñar creativa y, felizmente y, con ello me refiero a cambiar, innovar. Ser interesantes, provocadores, no convencionales, productivos, motivadores.

 

 

Es hora de ir pensando en un plan de emergencia para fomentar nuestro bienestar emocional aprendiendo y enseñando. Hemos llegado al punto de invocar a las musas. El secreto está en descubrirlas: somos nosotros. Pasión, razón y placer.  

 

Hasta la próxima “visionarios felices” del siglo XXI.

 

 

 

  Mª José Carretero Cenjor

Licenciada en Psicopedagogía (UCJC), Magisterio en Ciencias Humanas (E.U. La Salle). Coordinadora de Educación Infantil. Profesora/tutora de Infantil y Primaria en el Colegio Internacional SEK El Castillo. Talleres IBO: PEP. Directora Gerente de Escuela Infantil (CEUSEK) Profesora de Matemáticas y Ciencias Sociales en la Facultad de CCSS y de la Educación (UCJC). Coordinadora de alumnos de la facultad de Ciencias Sociales y de la Educación (UCJC). Componente del grupo de Investigación de Aprendizaje Social y Emocional (UCJC) DEA: Felicidad Subjetiva y Aprendizaje Social y Emocional: Un estudio con profesores de Educación Primaria. Finalizando Tesis.

 

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